La violencia de género es una espiral que desconcierta, paraliza y que con el paso del tiempo puede poner en riesgo la vida de las mujeres. Tres jóvenes comparten sus experiencias en relaciones violentas y, junto con dos activistas en acompañamiento a víctimas, nos muestran lo complicado de identificar y reconocer que una es violentada por la persona que dice amarnos. Para ello es fundamental que las mujeres conozcan los patrones de violencia que no son parte del amor e inicien un proceso que les permita romper ese círculo. Sus voces nos enseñan lo significativo de las redes de apoyo y la importancia de saber que todas tenemos el derecho a una vida libre, plena y segura.